Alex DeLarge

No, no, no. Alex no es un mal tipo. Le encantan los vasos de leche fresca, por las mañanas o por las tardes, y sin nada que mancille su color blanco impecable. Escucha además a Beethoven, Ludwig van, preferentemente la Novena Sinfonía, que es la inspiración pura. La que hace a uno perder los sentidos. A Alex le gusta vestir de blanco inmaculado también, y llevar un sombrero de copa elegante, de esos con forma de cilindro. Mira por debajo de unas pestañas encantadoras, Alex DeLarge, y tiene siempre una sonrisa en los labios.

Si no fuera por lo de los sentidos. En pleno éxtasis puede ocurrir que Alex pierda un poco los papeles, y se le pase un poco la mano con la energía. Y que pegue a un anciano o robe a un vagabundo o sodomice a una artista o acuchille a un colega o asesine a una mujer sola en su casa por la noche y con un falo gigante y de plástico. O que, simplemente, se tire él mismo por la ventana, de una altura que por poco ni la cuenta.

Sensibilidad y energía destructiva, ésas son las dos caras de Alex DeLarge. Nada más. Aunque hay otros que tienen otra teoría en esta sociedad, que no lo entiende - tal y como cuenta Stanley Kubrick en La naranja mecánica -: sólo quieren que funcione como un reloj, perfecto y mecánico, y desalmado. Un reloj, pero sin el alma del pobre Alex, que no es un mal tipo. Seguro que no. ¿O sí?





A Clockwork Orange

6 comentarios:

C.J.Orgaz dijo...

Es un tipo detestable. La película es cruel en cada uno de sus minutos. Transmitir amor o hacer llorar a alguien a través del cine dejó de tener misterios hace tiempo para Hollywood... sin embargo hace falta mucho más talento para lo que hizo Kubrick. Que no me guste la cinta no significa que no sepa apreciar su valor...
Otra obra inquietante y extremadamente cruel que acabo de terminar: 1984

Rubén de Vicente María dijo...

La naranja mecánica es la exaltación de la crueldad como belleza. Alex es un chaval con unos cánones distintos a la sociedad (que obviamnete no son correcots) y necesita un poceso de reeducación de pura inspiración orwelliana.

isaac dijo...

¡wow! la crueldad como experiencia estética, cierto, aunque la reeducación orwelliana ya la experimenta alex en la película, ¿no? y eso sólo lo convierte en una víctima más de esa sociedad de distintos cánones...
como en otra obra más de esas inquietantes y extremadamente crueles, otra utopía negativa: un mundo feliz (brave new world).

Unknown dijo...

Escribes "Beethoven,Luwing Van" como si fuesen dos personas distintas...ejje

Unknown dijo...

A mí me pareció una excelente película. La actuación de Malcolm McDowell es muy realista.

La pelìcula La Naranja Mecanica es genial porque se creó un lenguaje exclusivamente para la película y por el tema del control mental, que le dió el título a la obra. La película es muy futurista.

Y lo que tomaba Alex DeLarge no era un simple vaso de leche, el Moloko Plus era una leche con droga que lo preparaba para la ultra-violencia.

Miss Pipi dijo...

ehmm el lenguaje no se creo para la pelìcula..eso fue invencioòn de anthony burgess en el libro, donde tambièn se explica lo del tìtulo, y que no se menciona mayormente en la pelìcula..eso
gracias
ah es una d e mis pelis favoritas ,està demasiado bien hecha y una historia increible